El arte.

Cosa complicada, bella, y de vez en cuando, una puta mierda.
No hay mucha motivación, he perdido práctica, y aunque las ideas se precipitan como aves en picado, aves muy hermosas que muestran un exquisito espectáculo, sencillamente no permanecen lo suficiente.
Las historias, siguen madurando, pero esto ya tarda, y sencillamente mis manos no dibujan, y no me entra la gana de hacerlo. Se siente mal no poder hacer lo que antes con tanta facilidad y gusto se lograba. Ya no hay admiración, ya no hay competencia, ya no hay siquiera deleite por cada trazo, cada nueva técnica aprendida.

Claro, es gratificante que, cada día futuro que es alcanzado, tus trazos crecen, se desarrollan, crean nuevas formas, efectos, sentimientos, y que eso mismo sea una perpetua maquinaria de movimiento al arte que, sin importar cuántos estilos combinemos y generemos, sin importar en qué o quién se basen, o para qué o quién sean, sencillamente son tuyos, tus dibujos, o tus letras, o tus capturas, o algo que define al arte como cualquier impresión estética de la cultura. Y es así de grato saborear el gusto de ser conocido y reconocido por tu trazo, que sepan que fuiste tú. Sin embargo, cuando no consigues tal acometido, lo que podemos llamar arte se vuelve más una etapa desechable, sin sazón, con un execrable modo de existir, una promesa rota, una esperanza falsa, una razón más para llamarte mediocre. Eso es, nada más que una expresión dolorosa. Una forma extraña de conocimiento que, de no tener intención, es sólo un desperdicio.

Y por esa razón no me he puesto ni ha renovar mi galería, ni a revisar este olvidado lugar mío. Todos avanzan, yo me quedo, y posiblemente no nos volvamos a ver. No se preocupen, no cierro mi cuenta, y no espero que alguien se aparezca. Sencillamente, volver a empezar de "cero" si quiero volver a tal alegría de lanzar mis trazos, y que dichos trazos sean formidables, indetenibles, incansables, que no se puedan dejar atrás, o quedar obsoletos, sino sean lo que llaman diferente, en vez de peores o mejores. Inmedibles. Debe ser así, por tanto, mi deviantArt será más una bodega de reserva, un punto muerto que debes en cuando revivirá.